Santa Quiteria ha salido de su ermita, dando comienzo a las fiestas que Alpedrete celebra cada año en su honor. Acompañada de las vecinas y vecinos, de las Mayordomas, del Párroco, de las Peñas, de la Banda Municipal y de la corporación municipal ha llegado a la Plaza de la Villa, donde se ha leído el pregón de las fiestas.
Este año los encargados del pregón han sido dos jóvenes de Alpedrete: Álvaro González y Sandra Lázaro. Primero ha intervenido él, luego ella. A continuación, se reproducen los textos con los que ambos han honrado a Santa Quiteria y han abierto oficialmente las fiestas patronales en su honor.
Álbum fotográfico de ls Subida de Santa Quiteria y lectura del pregón 2019
Álvaro González
Aún paseo por la senda que dejaste tras de ti.
Aún te sigo sin poder alcanzarte.
Fuiste perseguida pero nunca sometida.
Andando me imagino tu martirio
Con esos perros ladrando porque cabalgabas
Y, sin embargo, callaron al verte.
Represora de rabia
Protectora de Alpedrete
Virgen y santa.
Santa y virgen.
Mártir.
Y aun sin cabeza, venciste.
Así, la estela que dejo tu valor continúa en la piedra
Y es la piedra la que nos protege
Y es tu valor el que nos enorgullece
Y eres tú nuestro orgullo
Que hace de Alpedrete un pueblo valiente.
Cada 22 de mayo lloras
Y son tus lágrimas las que nos mojan
Y es tu manto el que nos consuela
Y es tu pueblo el que recuerda
Que no puede esclavo ser aquel que sabe morir.
Continuemos, por tanto, con el ejemplo de nuestra santa madre y protectora, Santa Quiteria. Vencedora siempre. Que por querer ser libre perdió la cabeza en tiempos de Roma. Que por huir de las garras de aquellos que no la querían vino a parar a estas tierras agrietadas. Hoy la acompaña su perro fiel mientras sostiene el peine de la libertad. Pues todo un pueblo sabe lo que pasó y lo recuerda con orgullo. Mientras llueve, mientras el ibero león cuida su estandarte. Rampante. Erguido y altivo. Sabiendo que tu pueblo no permitirá más martirio. Sabiendo que tu ermita esta custodiada por tus guardianes. Sabiendo que aun vives porque Alpedrete vive. Sabiendo que todo esto es por tu memoria y en tu honor. Sabiendo que fuiste vencedora de la rabia. Que a fin de cuentas, Santa, aún muerta sigues viva.
Viva Santa Quiteria. Viva Alpedrete. Viva España.
Sandra Lázaro
Las fiestas de Alpedrete son un baile entre luces y música lleno de cosquilleos entre los saludos de aquellos que hace tiempo que no vemos.
Son Santa Quiteria y lluvia.
Son tus chicas huracán, capaces de poner el mundo patas arriba para conseguir sacarte una sonrisa. Y tus amigos que son de esos que empiezan bebiendo una copa y terminan bebiéndose la vida. Son el lugar donde el frío se hace calor y las noches días. El aire puro y las calles que sobrevolamos con más sueños que años. Con más alas que pies.
Son todos los buenos recuerdos, con los que aprendimos, crecimos. Donde empezamos a amar la vida y sentirnos en libertad. Son la amistad con la que celebramos goles, pero, sobre todo, celebramos la vida.
Son las risas, sonrisas. La sensación de cantar juntos. Algo a lo que no podemos renunciar porque ya forma parte de nosotros.
Da igual los años que pases y lo lejos que estés, hay lugares que son tu tierra firme, tu estrella polar. Que son, aunque no estés.
¿Conoces esa sensación de llamar a la puerta y que la abuela abra? Eso es Alpedrete. Un eterno abrazo. Porque hogar es donde siempre regresamos.
Siempre.
Bienvenidas, bienvenidos a casa otro año más.
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